Teología de la Prosperidad

Biblia | P. William Arias.

La Teología de la Prosperidad o la instrumentalización de la Biblia  

En un viaje de regreso de Puerto Plata a Santiago, para no dormirme en el trayecto, enciendo la radio y encuentro una emisora protestante, donde un predicador chileno la emprende contra sus compañeros pastores de diversas partes del mundo; como tal llama mi atención, y el punto de sus críticas se basaba en la llamada teología de la prosperidad; pues parece que en los últimos tiempos, esto ha  estado carcomiendo e instrumentalizando el mensaje de Dios contenido en la Biblia, en beneficio personal de los pastores y agrupaciones protestantes en cuestión.

Esta llamada Teología de la prosperidad  tiene su origen en los llamados tele-evangelistas norteamericanos de los años ochenta y noventa, donde aquellos hombres y mujeres, para mantener sus emporios religiosos, pedían a la gente que diera y enviará dinero, para mantener el trabajo de la fe y el Señor se lo recompensaría en prosperidad para sus proyectos, sobre todo los de carácter laboral o de negocio y también para su familia, pero en sí prosperidad personal. Tal parece que debido al desarrollo que las sectas protestantes han tenido en el comienzo de este siglo en América Latina, donde ya las mismas no dependen de ayudas foráneas, sino que al desplazarse hacia los sectores de clase media y alta del continente, han comenzado a desarrollarse por sí mismas, han hecho acopio de esta teología, y así como una vez se dio en los Estados Unidos, en nuestros países se han instalado una serie de grupos religiosos poderosos a nivel económico y de influencia en los medios de comunicación, gracias a los aportes que a través de los diezmos sus miembros hacen, pero como señalamos, aupado por la llamada Teología de la prosperidad.

Porque el protestantismo sectario entre nosotros, en principio se hacía notar en los barrios populares, con templos pequeños o en marquesinas de algunas casas, o las llamadas campañas evangelísticas en parques y carpas, pero hoy día no es así, ya vemos grandes y espaciosos templos, otros han comprado o rentado viejos cines cerrado; muchos pastores provienen del mundo de las finanzas y el mercadeo, creando espacios y lugares de impacto religioso para los interesados, al igual que un cuidadoso seguimiento de los miembros, en especial en lo relativo a la captación de fondos, unido al apoyo e incursión de algunos en sectores de poder.

Como decíamos todo esto tiene su base en la Teología de la prosperidad o del pacto, como también se le llama, y como toda teología tiene su base bíblica, la cual se le comunica y enseña a los seguidores. Los pasajes bíblicos más usado al respecto son:  Deuteronomio 8,18; Mateo 7,20; Romanos 4; Gálatas 3, 6-9.13.14.29, y otros textos afines a lo que se quiere o pretende lograr, pues muchos piensan que estos es solo una instrumentalización de la Biblia, con las finalidades pecunarias que ella conlleva, pues así como se dieron esos grandes emporios religiosos en Norteamérica, lo mismo se está dando hoy día entre nosotros, teniendo como base ideología una susodicha teología, que tal vez lo de ´´teología´´ sea de nombre y no más, sino que estamos ante un sistemas acomaditicio de textos bíblicos, con finalidades muy pocas o escasamente religiosas. Pues la teología es reflexión sobre la fe, es quehacer científico en cuanto a la revelación de Dios, no un mecanismo para justificar fines particulares o de grupo, retorciendo textos bíblicos. ADH 803