El Papa Francisco presidió la apertura solemne de la cumbre antipederastia, con un breve saludo a los 190 participantes, de los cuales 114 son presidentes de los episcopados del mundo.
El Papa dejó claro el objetivo del encuentro: escuchar el grito de los pequeños que piden justicia" y pidió a los participantes que adopten medidas concretas, no las acostumbradas condenas".
En el aula de los Sínodos, los presentes puestos en pié cantaron el "Veni Creator". El padre Lombardi es el moderador del encuentro.
"La Virgen María nos ilumine, para intentar curar las graves heridas que el escándalo de la pederastia ha causado en los pequeños y en los creyentes", imploró el Papa.
La primera jornada de la cumbre tuvo como protagonistas a las víctimas, y sus testimonios. Cinco de ellas, cuatro hombres y una mujer, hablaron en un vídeo.
Mons. Scicluna recordó que "las leyes civiles deben ser respetadas y las investigaciones internas deben hacerse rápidamente". "Deben conocernos como paladines de su seguridad y la de sus hijos y jóvenes", continuó diciendo. Fuente: Religión digital.
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