Indonesia: atentado en catedral Makassar

 

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Indonesia: 14 heridos en un atentado contra la catedral de Makassar

 

Al menos catorce personas han resultado heridas en la mañana de hoy domingo, 28 de marzo, Domingo de Ramos, en un atentado cometido a las puertas de la catedral de Makassar, en la isla indonesia de Sulawesi. Los autores, dos jóvenes que iban en motocicleta, accionaron la bomba que llevaban cerca de la puerta principal del templo, muriendo en el acto. Los heridos son cinco fieles que acababan de salir de misa y nueve transeúntes. Según ha explicado un portavoz de la policía, los terroristas pretendían «acceder al complejo eclesial» cuando fueron interceptados por un guardia de seguridad. La explosión, que destrozó numerosos vehículos aparcados en las inmediaciones, se produjo a la 10.30 de la mañana, hora local. «Acabábamos de terminar la misa y la gente se iba a su casa cuando sucedió todo», ha declarado el Padre Wihelmus Tulak, uno de los responsables del templo.

Además de la catedral del Sagrado Corazón de Jesús, el complejo acoge también la sede de la archidiócesis. Makassar es la capital de la provincia de Sulawasi. Se trata de una ciudad portuaria de aproximadamente millón y medio de habitantes. Pastoreada desde 1994 por monseñor Johannes Liku Ada´, la archidiócesis cuenta con unos 160.000 fieles que reciben atención espiritual en 48 parroquias. Durante el rezo del Ángelus de esta mañana el Papa Francisco ha hecho votos por una pronta recuperación de las víctimas.

Otros atentados

Con más de 260 millones de habitantes, el 87% de ellos creyentes en Alá, Indonesia es el mayor país musulmán del mundo. La Iglesia local ya había sido antes objetivo del terrorismo islamista. En 2018 seis personas, todas de la misma familia, detonaron tres bombas contra otras tantas iglesias en Surabaya, la segunda ciudad del país, asesinando a una docena de fieles. Cuatro de los terroristas eran niños de 9, 12, 16 y 18 años. Ese mismo día a una segunda familia radicalizada le estalló la bomba que preparaba en un apartamento para cometer otro atentado, y al día siguiente una tercera atacó también de manera suicida una comisaría. Estos ataques, reivindicados por un movimiento radical local vinculado al Estado Islámico, fueron los más mortíferos en una década en el archipiélago: en ellos murieron casi una treinta de personas, 13 de ellas terroristas.

El más sangriento atentado de la historia del país sigue siendo el cometido por la Yemaah Islamiya en octubre de 2002 en la isla de Bali, uno de los grandes destinos turísticos de la zona. En él murieron 202 personas, 164 de ellas turistas extranjeros.

 

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