Vida Religiosa | VN
El Papa a los monjes: No se
conformen con la mentalidad y los estilos del mundo
El Santo Padre
recibió en audiencia a la comunidad de la Abadía de Montevergine, en la
provincia de Avellino, con motivo del noveno centenario de su fundación por San
Guglielmo da Vercelli. Durante la Segunda Guerra Mundial el Santuario
custodiaba la Sábana Santa para salvarla de los bombardeos, el Papa dijo:
"Esta es una bella imagen de su vocación primaria: custodiar la imagen de
Cristo en ustedes, para poder mostrarla a sus hermanos".
“Físicamente
lejos del mundo”, pero “espiritualmente muy cerca de sus problemas y
angustias”. "Guardianes en el silencio de la comunión con el Señor" y
al mismo tiempo "huéspedes generosos en la acogida de los demás" para
ser así "signo vivo y elocuente de la presencia de Dios", sin
"ceder nunca a la tentación de conformarse a mentalidades y estilos del
mundo". Así describe el Papa Francisco la tarea y la misión de los monjes de la Abadía de
Montevergine, el antiguo santuario mariano en la provincia de
Avellino, en Italia, que celebra el jubileo por el noveno centenario de su
fundación, que tuvo lugar en 1124 por San Guglielmo da Vercelli. Precisamente a
partir de esta historia, que no comenzó con milagros ni acontecimientos
extraordinarios, sino con "la solicitud de un pastor", se desarrolla
el discurso del Papa en la audiencia de esta mañana en el Vaticano a monjes y
colaboradores de esta Abadía.
La obra de Dios en la raíz de cada acción
El obispo de
Avellino quiso construir una iglesia en un lugar alto y "reunir a un
pequeño número de personas para servir a Dios, para convertirla en un centro de
oración, evangelización y caridad". Y la oración, la evangelización y la
caridad son las piedras angulares de la vida y del apostolado de la comunidad
de la Abadía, afirma el Pontífice, que invita ante todo a "hacerse 'don de
Dios'".
“Es el sentido
de la vocación monástica, que pone en la raíz de cada acción la obra de Dios,
es decir, la oración, a la que san Benito recomienda no anteponer nada”.
Los ojos "grandes y buenos" de la Virgen
María
Hacerse
"don de Dios" significa también rezar para tener "esos grandes y
buenos ojos" de la Virgen en el hermoso icono conservado en el Santuario
que, colocado en lo alto "como un mirador" y "visible desde toda
Irpinia", es el destino de miles de fieles que "llegan allí, a menudo
a pie, para encontrar consuelo y esperanza, para recibir nuevas fuerzas durante
la peregrinación, como todavía hoy recuerdan muchos cantos tradicionales,
incluso dialectales, que acompañan las peregrinaciones", subraya el Papa.
“La Virgen con
sus grandes ojos almendrados, dispuesta a recoger lágrimas y oraciones,
mostrando a todos, de rodillas, al Niño Jesús, el Hijo de Dios hecho hombre. Su
ejemplo es el que hay que seguir”.
La "gracia" de haber custodiado la Sábana
Santa durante la guerra
Aun retomando
los hilos de la historia de la Abadía, el Papa Francisco recuerda una
"gracia" recibida por la comunidad de Montevergine que fue la de haber
acogido, durante la Segunda Guerra Mundial, la Sábana Santa, traída en secreto
al Santuario para su conservación del peligro de los atentados.
“También ésta
es una bella imagen de su vocación primaria: custodiar en ustedes la imagen de
Cristo, para poder mostrarla a sus hermanos”.
Donarse generosamente
En este
sentido, el Papa Francisco invita también a "ser don de Dios", es
decir, a entregarse "con generosidad" a quienes suben al Santuario,
para que, "acercándose a los sacramentos de la Eucaristía y Reconciliación,
se sientan, en la atención y en la oración, acogidos y llevados bajo el manto
de la Madre de Dios".
“Quienes
acudan a ustedes en busca de luz no deben quedar decepcionados”.
Bajo la mirada de "Mamma Schiavona"
Para concluir,
el Santo Padre exhorta a valorar el don de la comunidad de Montevergine de
"ser huéspedes en la Casa de María, de vivir bajo su mirada
misericordiosa, custodiada por Mamá Schiavona, como cariñosamente la
llaman".
“Cultívenlo en
ustedes para que puedan compartirlo con todos”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Promueve el diálogo y la comunicación usando un lenguaje sencillo, preciso y respetuoso...