Dominicanos en el Exterior | Jansel Hernández
Tiempos de añoranzas
Una de las épocas que más disfruta el dominicano es la época de navidad, pero las añoranzas hacen estragos en el corazón de muchos dominicanos ausentes.
Lejos del puerco asado, las teleras, los dulces y coquitos del primo que vino de Nueva York, está el deseo inmenso de ver la alegría que rodea esta época. El olor mañanero y la brisita fresca de diciembre, el saber que tus viejos están en salud y que lo que ya no están se extrañan con respeto, eso y muchas cosas más trae navidad.
Para los dominicanos ausentes en estos tiempos siempre hay pretexto para un “junte” para hablar del país, para pensar en los nuestros. La navidad nos une y ella puede hacer del más revoltoso una persona de paz del más callado un hablador.
La navidad nos hace sentir que somos familia, aunque no tengamos el apellido Pérez o Hernández en común aquí en EEUU, todos los dominicanos somos primos porque vemos en el rostro de un colega el hermano o familiar que dejamos en nuestro país.
“Paz en el cielo y en la tierra a los hombres y mujeres de buena voluntad” que la navidad y estos tiempos de jolgorio y alegría despierte en nosotros el deseo inmenso de honrar lo que ya no están, vivir el presente con dignidad y mirar al futuro con la esperanza de mañana el sol saldrá y que la alegría del compartir nunca morirá. Felices fiestas
Feliz Año Nuevo 2017…
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