Mitos y creencias | Andrea
Safier
Los ‘cinco venenos blancos’
5 alimentos son
considerados injustificadamente como “venenos blancos”, es decir, tóxicos o
peligrosos para la vida. La realidad es otra, porque ni el azúcar, ni la sal,
ni el arroz, ni la harina de trigo, ni la leche son tan perjudiciales para dañar
la salud. Puede que no sean saludables en ciertas condiciones, pero no tendrán
la eficacia de un veneno para atentar contra la vida.
El azúcar, por
ejemplo, es un añadido no es saludable, pero no se trata de un veneno. No se
puede afirmar exactamente de todos en que medidas son perjudiciales, hay que
distinguir entre unos y otros, porque cada uno tiene sus peculiaridades.
Las noticias
falsas también abundan con recomendaciones exageradas para protegerse de estos
cinco “venenos blancos”, y las propagan partiendo de muchos mitos que acompañan
lo que de cierto tiene que con esos alimentos hay que tener cierto cuidado y no
abusar de su consumo. Generalizando, se afirma que los alimentos blancos son
perjudiciales para la salud.
En estos casos
sucede que los datos científicos se confunden con verdades y mentiras a medias.
Al negar la condición de “venenos blancos” a estos alimentos, no descartamos
que en muchos casos sean perjudiciales, tampoco se afirma que sean iguales
sanos. Hay que conocer los riesgos reales que tienen cada uno de afectar a la
salud en ciertas condiciones, pero debemos descartar que sean alimentos
venenosos.
Hay
recomendaciones que provienen del área de la salud para el mejor consumo de los
alimentos blancos. Están hechas y divulgadas para que usemos esos alimentos de
manera que contribuyan al bienestar.
Numerosos
problemas de salud están asociados al azúcar y la sal. Pero su consumo
moderado, bajo ciertas condiciones, no ofrecen los riesgos que se les quieren
etiquetar. Nuestro cuerpo necesita la glucosa del azúcar para nuestras células,
pero el azúcar añadido que consumimos es innecesario para conseguir su
presencia. Comer azúcar no mata. Consumirlo de manera inteligente limita lo
perjudicial que pueda ser según esté procesada.
El exceso de
azúcar está asociado a problemas como la obesidad, las enfermedades
cardiovasculares, la diabetes, el hígado graso, entre otros. Por eso es bueno
limitar el consumo innecesario de azúcar. Muchos desechan la azúcar blanca pues
se considera que en el proceso de darle el color, se le añade químicos, pero
también ocurre con la azúcar morena.
Así podríamos
mencionar los demás alimentos blancos, para llegar a la conclusión de estar
atentos a su consumo exagerado, para que no afecten áreas de nuestra salud y la
moderación en su uso contribuya a limitar el efecto negativo, especialmente
cuando algunos de ellos tienen que ver con problemas de salud que sabemos no
ligan con estos mal llamados “venenos blancos”.
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