Matrimonio y Familia | Alejandra López/ LFI
Siete hábitos para
alcanzar la felicidad en la madurez, según Harvard
¿Hay mayores posibilidades de ser feliz cuando se
es joven? El científico social y músico Arthur C. Brooks ha ganado
reconocimiento en los últimos años por su trabajo y publicaciones sobre la
felicidad, especialmente sobre cómo combatir las frustraciones que llegan con
el paso de los años -profesionales, por ejemplo- que pueden comenzar a socavar
el bienestar al llegar la madurez de la vida.
Un tema que el autor de varios best sellers y
columnista de The Atlanthic trata también continuamente con sus estudiantes,
usualmente de unos 20 años, a quienes les pregunta si se imaginan más felices
en 10 años. La mayoría cree que sí, pero la situación cambia si llevan el
ejercicio 50 años en el futuro.
Sin embargo, parece haber esperanza, como señala
Brooks en una de sus columnas. En la mayoría de las personas, aunque la
felicidad tiende a disminuir a lo largo de la edad adulta joven y la mediana
edad, tocando fondo alrededor de los 50 años, vuelve a subir a mediados de los
60.
Pero ese es también un momento de inflexión en el
que las personas mayores se dividen en dos grupos a medida que envejecen: unos
se vuelven mucho más felices y los otros se vuelven mucho más infelices.
Se trata de un momento de la vida donde muchas
personas también comienzan a darse cuenta de la importancia de haber tomado
buenas decisiones financieras en sus primeras décadas de vida, pues la la
planificación y el ahorro puede haberles garantizado mejores condiciones para
la vejez. De acuerdo con Brooks, una situación similar ocurre con la felicidad.
El autor, que precisamente
aborda esta situación en su libro From Strength to Strength: Finding Success,
Happiness, and Deep Purpose in the Second Half of Life, plantea que:
En 1938 algunos investigadores de la Escuela de
Medicina de Harvard en el que inscribieron a un grupo de hombres que luego
estudiarían en esta misma institución y a quienes siguieron desde la juventud
hasta la edad adulta, preguntándoles cada uno o dos años sobre sus estilos de
vida, hábitos, relaciones, trabajo y felicidad.
Desde entonces, el estudio se ha ampliado para
incluir a personas más allá de los hombres que fueron a Harvard, y sus
resultados se han actualizado periódicamente durante más de 80 años. Datos que
son calificados por Brooks como un tesoro oculto sobre cómo vivían, amaban y
trabajaban las personas entre los 20 y los 30 años, y sobre cómo resultó su
vida en las siguientes décadas. Una bola de cristal de la felicidad desde la
que podemos aprender a invertir en nuestro propio bienestar futuro.
A medida que los participantes del Estudio de
Harvard sobre el desarrollo de adultos han envejecido, los investigadores los
han categorizado con respecto a la felicidad y la salud. Hay mucha variación en
la población, pero, de acuerdo con Brooks, hay dos grupos que emergen en los
extremos: los que que disfrutan de buena salud física, así como de buena salud
mental y una gran satisfacción con la vida y los “enfermos tristes”, que están
por debajo del promedio en salud física, salud mental y satisfacción con la
vida.
Cuando eran jóvenes, los integrantes del primer
grupo acumularon ciertos factores que pueden haber aportado a la felicidad en
su vejez, algunos de ellos difíciles de controlar como tener una infancia
feliz, descender de antepasados longevos y evitar la depresión clínica. Pero
también hay algunos factores que sí pueden estar bajo nuestro poder de
decisión.
Utilizando datos del estudio de Harvard, Brooks
señala en su columna que dos investigadores demostraron en 2001 que podemos
controlar siete grandes decisiones de inversión de manera bastante directa:
fumar, beber, peso corporal, ejercicio, resiliencia emocional, educación y
relaciones.
Esto es lo que debe hacer para invertir
desde temprano en su felicidad futura:
No fumar
No fume, o si ya fuma, déjelo ahora. "Es
posible que no tenga éxito en su primer intento, pero cuanto antes comience el
proceso de dejar de fumar, más años sin fumar podrá invertir en su cuenta de la
felicidad", asegura Brooks.
Cuide su forma de beber
El abuso del alcohol está fuertemente relacionado
con el tabaquismo en el estudio de Harvard, pero muchas otras investigaciones
muestran que, incluso por sí mismo, es uno de los predictores más poderosos
para terminar triste y enfermo.
El autor recomienda que, si tiene algún indicio de
problemas con la bebida en su vida, obtenga ayuda ahora. Si tiene problemas con
la bebida en su familia, no se arriesgue y mantengas alejado de este hábito.
Mantener un peso corporal saludable
Consuma una dieta con muchas frutas y verduras y
porciones moderadas, pero evite las restricciones intensas que no puede
mantener a largo plazo.
Actividad física
Programe tiempo para moverse todos los días y
manténgalo. Podría decirse que la mejor forma única y comprobada de hacer esto
es caminar todos los días.
Mecanismos para afrontar situaciones
difíciles
"Cuanto antes pueda encontrar formas
saludables de lidiar con las angustias inevitables de la vida, más preparado
estará si la mala suerte golpea a los 80 años", dice Brooks. Esto
significa trabajar conscientemente, tal vez con la ayuda de prácticas
espirituales o incluso terapia, para evitar la rumiación excesiva, las
reacciones emocionales no saludables o el comportamiento de evitación.
Seguir aprendiendo
Más educación conduce a una mente más activa en la
vejez, y eso significa una vida más larga y feliz. "Eso no significa que
tengas que ir a Harvard; simplemente necesita participar en un aprendizaje
intencional y de por vida. Por ejemplo, eso puede significar leer no ficción
seria como parte de una rutina para aprender más sobre nuevos temas", dice
el autor.
Cultivar relaciones estables a largo plazo
Haga el trabajo para cultivar relaciones estables
a largo plazo ahora. Esto puede incluir desde un matrimonio estable hasta las
relaciones con familiares, amigos y parejas. El punto es encontrar personas con
las que pueda crecer y contar, sin importar lo que se cruce en su camino.
Publicado por LaFamilia.info (original de El
Tiempo)
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