Ante la tumba vacía

Reflexión | Sandy Yanilda Fermín

 

La tumba Vacía

 

Me encanta una canción que dice: “Si la tumba donde sepultaron a Jesús pudiera hablar, me diría una cosa, muy grande y maravillosa, no está aquí: Resucitó.

 

Saben qué, me visualicé frente a la tumba del sepulcro donde estuvo Jesús y me preguntaba: ¿Por qué la tumba estaba vacía? Y me dije: La tumba se quedó vacía, para demostrarnos a todos, que la cruz y la muerte, no tuvieron poder sobre Jesús.

 

Al visualizarme, me vi moviendo la piedra de mi corazón y de todo aquello que no me permita ser mejor ser humano ante los ojos de Dios. Visualízate tú también moviendo esa piedra pesada que hay en tu corazón, deja entrar los destellos de su luz en medio de la oscuridad. Deja ese sepulcro y vacíalo. No nos quedemos sólo observando que la piedra se movió, ahora corre como lo hizo María Magdalena para llevar esta noticia primero a ti y luego a los que están a tu alrededor.

 

Reflexionaba también acerca de:

 

¿Quién o qué removió la roca de tu corazón para acercarte a Dios por primera vez? Si la piedra no se hubiera removido ¿qué hubiera pasado con nuestra Fe?

¿Qué nos impide mover las piedras que están en nuestro corazón para ver a Jesús lleno de luz? ¿Quién se convierte en piedra que obstaculiza tu fe para creer en su palabra y resucitar con él?

 

¿Qué hizo Dios con la roca de María Magdalena como mujer cuando encontró la tumba vacía?

¿Que hizo Dios con la roca de los que no creían en él, cuando entró a Jerusalén?

 

¿Que hizo Dios con la roca de la duda de Tomás para darle su paz?

¿Que hizo Dios con la roca de Emaús para reencontrarse con Jesús? ¿Que hizo Dios con la roca de los que estaban cansados de acusarles?

 

¿Qué hace hoy Dios si estas cansado de mover la roca del miedo y la desconfianza?

¿Qué hace hoy Dios para ofrecernos su espíritu de amor para cambiar nuestra vida?

 

Jesús resucitará, para brindarnos un milagro, pero de Amor infinito. ¡Jesús está vivo y vive entre nosotros!