¿Cotorra vieja no aprende inglés?

Comunicación | Máximo Encarnación Gomera

 

¿Cotorra vieja no aprende inglés?

 

Mucha gente cree que aprender inglés es algo muy difícil y que es necesario tener facultades intelectuales fuera de lo común para lograrlo.  Otra creencia que se tiene sobre el aprendizaje de esta lengua es que si la misma no se aprende cuando se es un niño o una niña, ya no hay oportunidad para ello.  En este sentido, se oye a muchas personas repetir esta expresión del pueblo: “cotorra vieja no aprende a hablar.”  Por el contrario, tanto la experiencia como los estudios que se han realizado demuestran que esas creencias sobre el aprendizaje de inglés o cualquier otra lengua no son ciertas.

 

Requisito Principal

Hace muchos años entendidos y entendidas en el área llegaron a la conclusión de que toda persona mínimamente sana física, mental y emocionalmente, puede aprender, no sólo inglés, sino cualquier lengua extranjera que desee.

 

La Necesidad Como Empuje

Para aprender inglés como lengua extranjera o como segunda lengua, un primer requisito sería que la persona sienta la necesidad de comunicarse en ese idioma.  Esa necesidad puede estar relacionada con el trabajo o simplemente con la interacción, por cualquier motivo, con personas que no hablan nuestra lengua materna.  Otra necesidad puede ser el simple hecho de desear experimentar un poco más de crecimiento personal, entre otras cosas.

 

Otros Requerimientos

Acompañando a los diferentes tipos necesidades está el requisito de la firme voluntad que a menudo es el resultado de una actitud positiva frente a la tarea de aprender a dominar una lengua que ocupa el segundo lugar tomando en cuenta el número de personas que la hablan en el mundo.

 

Luego de la persona haberse percatado de la necesidad y de que tiene la voluntad para aprender a comunicarse en inglés, lo que sigue es estar dispuesto (a) a invertir tiempo y los recursos mínimos necesarios para llegar a la meta.  Estos recursos tienen que ver básicamente con materiales didácticos.

 

Finalmente, si está latente la necesidad de aprender inglés; si hay una fuerte decisión de interactuar en esta lengua extranjera; si la persona se organiza y hace el esfuerzo necesario, entre otras cosas, entonces el aprendizaje se hará presente.  Es evidente que no es necesario tener condiciones excepcionales de ningún tipo para lograr entender, hablar, leer y escribir en inglés.  Cuando la persona penetra en el mundo maravilloso de aprendizaje del mencionado idioma o de cualquier otro idioma extranjero, el objetivo primordial es interactuar con otros seres humanos de culturas diferentes. ADH 716.