Dominicanos en el Exterior | Jansel Hernández
La sociedad en la que estamos nos exige que corramos, que las cosas pronto pasan de moda que ya el celular esta desfasado o que tal o cual atuendo no esta a la moda, que si no nos casamos nos quedamos “jamón” y si nos casamos hay que tener los hijos porque son ellos quienes nos van a mantener y cuidar de uno en la vejez.
Lo primero: la sociedad cambia con rapidez y muchos valores ya no son valores sino, simplemente recuerdos y cuentos de caminos de nuestros ancestros. Si usted no tiene presupuesto para darle una manutención digna a sus hijos deje de estar pensando en el último celular que salió y dele una buena educación llena de amor, pero sobre todo con la alimentación y el cuidado ideal. Si sus ingresos no le dan para gastarse un tiquet en la última pelÃcula de Robertico con toda la familia intente por lo menos visitar con sus hijos a sus padres ellos disfrutan de sus nietos.
Hay que desmitificar algunos dioses modernos quitarlos de nuestros altares y ponerlos en el lugar al que pertenecen y simplemente dejar el morbo social que se encargue de los demás, usted simplemente disfrute de los detalles que alegran el alma. ¡Qué tal o cual atuendo está de moda! vÃstase del atuendo de la cordura y la paciencia y deje ir…
También existe quien piense diferente a usted, que tal vez los hijos no les interese tenerlos a los 25 y de tenerlos no es para que le mantengan en su vejez, sino simplemente por un ejercicio de reproducción coherente, ya que los hijos son de la vida no de los padres. Si fulano o mengana no se casaron déjelos tranquilos “mastique y trague”, y deje esa gente vivir en paz que el chisme empacha y el vivir lo ajeno es algo raquÃtico y de poco provecho.
Viva la paciencia en sus deseos, si el celular no esta el mundo no se acaba, procure enriquecer su mente con un buen libro o con buenos amigos. Evite ser invadido por la impaciencia social que nos pone a correr y no nos deja tiempo de respirar los buenos momentos tales como pasar tiempo con la familia o simplemente darse un chapuzón sin temor a lo que debo o quiero. ADH 823
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Promueve el diálogo y la comunicación usando un lenguaje sencillo, preciso y respetuoso...