La
Iglesia Hoy | Redacción Amigo del Hogar
Myanmar, el viaje del papa Francisco en 2017
Entre diplomacia y profecía
Aung San Suu Kyi fue arrestada por el ejército y el ejército
tomó el control de Myanmar. Así lo anunció la Liga Nacional
para la Democracia (LND), un partido de la Premio Nobel. El papa Francisco
visitó Myanmar en 2017 y se reunió con Aung San Suu Kyi. Presentamos fragmentos
de la crónica de ese viaje realizada por el P. Antonio Spadaro SJ.
Como parte de su itinerario hacia el este, después de Corea
(2014), Sri Lanka y Filipinas (2015), Francisco aterrizó en Myanmar y
Bangladesh. El avión que transportaba al Papa a bordo despegó del aeropuerto de
Fiumicino el 26 de noviembre y aterrizó en el aeropuerto de Yangon el día
siguiente.
Profecía y diplomacia evangélicas: quizás así podríamos
resumir el sentido del viaje apostólico del Papa Francisco a Myanmar y
Bangladesh, es decir, al corazón del continente asiático. Nuestra revista ya ha
descrito la situación que se habría encontrado el Papa, aterrizando en el cruce
de la India, China y el sudeste asiático [1] . Hay muchos planes de lectura
para este viaje. Intentaremos proponer los principales.
El "hospital de campaña" de la Iglesia
Hay una dimensión geopolítica en el itinerario de Francisco en
el corazón de Asia. Pensamos, por ejemplo, en la nueva Ruta de la Seda [2] y
las tensiones nacionalistas indias [3]sobre la zona. Está entrelazado con la
cuestión religiosa, donde el budismo y el islam se encuentran y chocan.
Francisco se mudó de Myanmar, con una gran mayoría budista (88% de la
población), a Bangladesh, mayoritariamente musulmana (90%). Y el corazón de
Asia, lo sabemos bien, es también tierra de mártires cristianos. El diálogo
político y el diálogo interreligioso, por tanto, son las formas de la
"cultura del encuentro" que siempre ha predicado Francisco.
Este camino apostólico parecía problemático, arduo,
arriesgado, en una frontera difícil y conflictiva. En particular, debido a la
trágica situación de los rohingya, grupo étnico de religión islámica que, según
informes de Naciones Unidas, es una de las minorías más perseguidas del mundo.
Alrededor de China, la potencia mundial
Otro elemento importante de este viaje es el hecho de que el
Papa recordó explícitamente el nuevo papel que China quiere jugar - y ya está
jugando - en el contexto internacional. Un hecho que el propio Francisco
resumió, en la rueda de prensa de su regreso a Roma, con estas precisas
palabras: «Beijing tiene una gran influencia en la región, porque es natural:
no sé cuántos kilómetros de frontera tiene allí; incluso en las misas hubo
chinos que vinieron ... Creo que estos países que rodean a China, también Laos,
Camboya, necesitan buenas relaciones, son vecinos. Y encuentro esto sabio,
políticamente constructivo, si podemos continuar. Sin embargo, es cierto que
China hoy es una potencia mundial: si lo vemos de este lado, puede cambiar el
panorama".
La diplomacia como parte integral de la profecía
Hablando de China, Francis utilizó una expresión interesante:
ver cosas de un lado que pueden cambiar la percepción del paisaje. Y habló de
relaciones internacionales "políticamente constructivas". No debemos
perder el significado de estas palabras, que son la clave de la
"diplomacia de la misericordia" de Bergoglio. El Papa es constructivo
en sus gestos y palabras. No hace las cosas por presión de los medios o para
adquirir una luz positiva: hace lo que debe hacer para "tender"
puentes y mantener abiertas las puertas del diálogo. El suyo es un realismo que
apunta a tejer relaciones.
El sueño de una Myanmar reconciliada entre política y religión
El viaje a Myanmar tiene lugar solo unos meses después del
establecimiento, a principios del pasado mes de mayo, de relaciones
diplomáticas plenas con la Santa Sede. Y es el primer viaje de un Pontífice a
este país. La pequeña pero ferviente comunidad católica de la nación celebró la
beatificación de dos mártires en 2014: un catequista autóctono y un misionero
italiano.
El encuentro con Aung San Suu Kyi
El Pontífice se dirigió al Centro Internacional de
Convenciones, donde su discurso fue precedido por el de la Sra. Aung San Suu
Kyi. Para entender bien la figura del líder birmano, es necesario recordar que
el ejército ha mantenido el control de los ganglios vitales del poder. Estamos
en presencia de una democracia incompleta, y la "dama" -como la
llaman en Myanmar- se ve obligada a caminar por un camino muy estrecho, donde
se necesita poco para perderlo todo, destruyendo el trabajo de su vida por la
libertad y la democracia. El Papa lo sabía perfectamente.
Publicado en la Civilización Católica (Italia)
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