Fe y Vida | Sara de la Torre/RE
«Y tú, ¿Qué vives en la Iglesia?»
El
sostenimiento de la Iglesia muchas veces «no se ve». Y cuando digo que no se ve
es porque son muchas las manos que sostienen la estructura parroquial y
diocesana, dedicando su vida por un compromiso personal con la Iglesia, y a
veces, pasa un poco desapercibido. La Iglesia es Madre y como tal, realiza esa
labor callada, mueve los hilos preocupándose de cada uno de sus hijos, con
estructuras, logísticas y tareas que hace que el engranaje funcione y que «a
nadie le falte de comer». Pero toda esa tarea organizativa requiere de
compromiso, de trabajo que no es invisible y que después de dos años
conviviendo con un virus arrollador, nos ha hecho darnos cuenta «de que nadie
se salva solo». Por eso, el domingo 7 de noviembre, celebramos el Día de la
Iglesia Diocesana. Un día para recordar y visibilizar que no vivimos la fe en
solitario, sino que juntos, en familia, logramos mantener una parroquia
apasionada y activa. Un día para preguntarnos qué vivimos en la Iglesia y por
Quién seguimos en ella.
En
estos momentos, en que parece que la situación sanitaria está más controlada,
no podemos olvidar que las necesidades de tantas personas no solo no han
disminuido, sino que se han agravado especialmente en la demanda de escucha,
acompañamiento y apoyo personal, familiar y social, y en nosotros pueden y
deben encontrar la acogida y compañía que les descubra la presencia del Señor
en sus vidas, a la vez que se hace cargo de sus necesidades más inmediatas. En
la parroquia «hemos nacido» a la fe y en ella descubrimos que somos una familia
dentro de otra gran familia, la de los hijos de Dios. De esta forma, una vez al
año celebramos de una manera especial ese sentimiento y recordamos lo importante
que es poner lo que somos al servicio de los demás.
Por
todo esto el Secretariado para el Sostenimiento de la Iglesia lanza la campaña
para el Día de la Iglesia Diocesana, que este año se celebra el domingo 7 de
noviembre. «Somos lo que tú nos ayudas a ser. Somos una gran familia contigo»
es el lema que recuerda que juntos, como familia, logramos una parroquia activa
que responde a la llamada de Dios. Juntos somos Iglesia Diocesana, poniendo
todo lo que somos al servicio de los otros y colaborando juntos llevamos a cabo
la labor de la Iglesia. Juntos logramos una parroquia viva, comprometida,
apasionada por Jesucristo y entregada a los demás.
La
importancia de ponerse al servicio de los demás
Esta
campaña nos activa para que, entre todos, construyamos una parroquia más
comprometida, más cercana y entregada a los demás. Porque, juntos, llegamos más
lejos. Una participación en la que cada uno aporta según sus posibilidades y
sus circunstancias. «Con todo ello queremos resaltar el deseo de ser más, más
allá de la parroquia, de nuestra comunidad cercana. Una estructura de Iglesia
Universal que es unión de Iglesias Diocesanas, de la que todos formamos parte».
Así lo ha explicado para ECCLESIA Joseba Segura Etxezarraga, obispo de Bilbao,
responsable del Secretariado para el Sostenimiento de la Iglesia.
«La
Iglesia diocesana es un lugar en el que hay muchísima gente con sensibilidades
diversas, todas ellas complementarias y necesarias. Primero, porque en esa
variedad hay una gran riqueza de comprensión de lo que es la fe desde aspectos
distintos, de lo que significa seguir a Jesús y tener devoción por Jesús. Por
otro lado, la misión de la Iglesia significa celebrar la fe, pero también
transmitir la Palabra de Dios y también “hacer”; hacer las obras que Jesús hacía,
sobre todo las encaminadas a los pobres». Así, el prelado ha destacado que en
este día de festividad diocesana «se requiere no solamente al obispo y a los
curas, porque alcanzarían a un pequeño núcleo de gente»; se necesita a todos
los diocesanos «porque si cada uno de ellos, en su círculo, se convierte de
alguna forma en el Corazón de Jesús y en la presencia del amor de Dios en la
vida, pues llegaremos a miles y miles de personas».
Publicado
por Revista Ecclesia
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Promueve el diálogo y la comunicación usando un lenguaje sencillo, preciso y respetuoso...