Papa Francisco | Aica
"Un 50% de pobres es, con total certeza, un 50% de
derechos humanos incumplidos"
Lo
aseguró el Papa en un videomensaje a los participantes de la reciente Cumbre de
Magistradas y Magistrados sobre Derechos Sociales y Doctrina Franciscana en
tiempos de pandemia y pospandemia.
Puerto
Iguazú, en la provincia argentina de Misiones, fue la sede de la primera Cumbre
de Magistradas y Magistrados sobre Derechos Sociales y Doctrina Franciscana en
tiempos de pandemia y pospandemia, organizado por el Comité Panamericano de
Juezas y Jueces por los Derechos Sociales y Doctrina Franciscana. Del 3 al 4 de
marzo, los asistentes compartieron dos intensas jornadas de reflexión, con seis
paneles: medioambiente; refugiados, migrantes y desplazados; Estado y Mercado,
gestión pública y economÃa popular; pueblos indÃgenas; trata de personas,
niñez, adolescencia y género; emergencia habitacional y derecho a una vivienda
digna.
El
Comité se constituyó según acta dada el 4 de junio de 2019 en la Ciudad del
Vaticano, bajo la inspiración de las palabras de Francisco, quien la suscribió
personalmente.
Para
este encuentro, el papa Francisco envió un video mensaje, expresando la alegrÃa
de saludarlos y su satisfacción por el hecho de que la provincia de Misiones
los albergue “para poder reunirse a pensar la justicia y repasar la misión que
tienen como jueces en este presente tan complejo”.
“Hace
tiempo que, cuando pienso en la justicia, me preocupa –la palabra es dura, pero
la diré igual- una cierta insustancialidad, con la que tan a veces se la
analiza. Me duele ver cómo las formas van tapando la sustancia, y la sustancia
se pierde, cómo esta cultura del adjetivo mata lo sustantivo. Los adjetivos
reemplazan los sustantivos, y vamos perdiendo dÃa a dÃa profundidad y nos
mantenemos en la superficie. No se trata de pintar la realidad o de barnizarla,
sino de ir a la esencia de la realidad”.
Francisco
manifestó su sorpresa por la constante generación de “normas de todo tipo para
garantizar los derechos humanos” y la creación de órganos especializados para
velar por esos derechos. “Todo luce muy bien, está bien barnizado, pero… ¿qué
ocurre en el plano de lo real? ¿Qué ocurre en el plano real con los derechos
humanos, por ejemplo?”, reflexionó.
“A
veces, encontrando metáforas, pienso en la naturaleza. Me da la impresión de
que estamos viendo la justicia como una hoja de un árbol cuyas raÃces están
enfermas y su tronco, casi seco. Esa hoja, todavÃa con un poco de verde, con
débil lozanÃa, está condenada a morir si no curamos desde la base a este árbol
que está agonizando”, afirmó.
El
obispo de Roma consideró que “el abordaje superficial y pequeño de la justicia
no tiene entidad frente al drama de la injusticia estructural, y eso es lo que
muchas veces pasa hoy en tantas sociedades del mundo”. Francisco aseguró que
“estamos pensando en el detalle, a veces insignificante, cuando los procesos de
deterioro humano y de deterioro social se nos están viniendo encima con sus
secuelas de dolor y de degradación”.
El
Santo Padre lanzó un mensaje contundente: “Un 50% de pobres es, con total
certeza, un 50% de derechos humanos incumplidos”, y añadió que “es hora de
reemplazar los discursos por las palabras, la naturaleza hipotecada y la
humanidad en peligro nos llaman desesperadamente a actuar, y debemos responder
a este llamado”.
Según
el Papa, las personas que tienen el privilegio de estar investidas por el poder
judicial tienen todavÃa mayor responsabilidad en este “duro presente”, asà lo
valoró. “La omisión, el facilismo, el conformismo y el desinterés por el otro
son formas de corrupción, tan dañinas como el propio cohecho”. Para Francisco,
la jueza o el juez que no vive ni siente el sufrimiento del otro, que no
comprende la dimensión de reclamo social de justicia, “difÃcilmente pueda obrar
su misión de juzgador”.
El
pontÃfice los invitó a ser valientes, a sentir, a no perder la fe, a sostener
el rumbo. “Y es la gran oportunidad de la existencia humana: poder transformar
para el bien”, dijo, con la esperanza de que la Cumbre los ayude a ser
protagonistas de este camino. “No lo abandonen. Vean en Jesús, en Cristo, el ejemplo
de quien sintió, actuó y se comprometió sin condiciones para luchar por la
redención humana. En Él, todos los hombres y mujeres honestos y buenos
encontrarán con seguridad fieles compañeros de ruta”, expresó, y concluyó con
su habitual petición de rezar por él.
Más
allá de los nominalismos
Desde
Misiones, Gustavo Daniel Moreno, asesor tutelar ante la Cámara de Apelaciones
en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad Autónoma de Buenos
Aires, Argentina comentó a Radio Vaticana-Vatican News que “la idea es
encontrar, como dice Francisco, una justicia que no solamente sea un
nominalismo jurÃdico, sino que las leyes y sentencias que se dicten realmente
se ejecuten, tengan eficacia y puedan transformar la calidad de vida de las
personas que son justiciables”.
El
magistrado subrayó que pretenden “escapar de la formalidad e ir a un derecho
sustancial”. “No es solo una cuestión de formas. Hoy, la justicia, el derecho
están más en una cuestión de formas. Nosotros adherimos a esto y nosotros vamos
por convertir una justicia realmente para los más vulnerables”, consideró
Moreno.
Publicado
por Aica.org
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Promueve el diálogo y la comunicación usando un lenguaje sencillo, preciso y respetuoso...