Forjando Vivencias | Lic. Juan Fco. Puello Herrera
“A causa de mi Nombre, ustedes serán odiados por todos, pero el que se mantenga firme hasta el fin se salvará”. Mateo 10, 22
Serán odiados por mi causa
Si leemos detenidamente el texto de la Palabra, vemos, que presenta las
dificultades que entraña la misión que encomienda Jesús a sus discípulos de
llevar el mensaje de salvación que trae el reino, y las persecuciones que
acarrea. Las palabras de Jesús ponen de manifiesto, el destino dramático que
les espera a los misioneros del evangelio, ofreciéndoles al mismo tiempo,
motivos de consuelo y ánimo.
En el horizonte de esta misión aparecen los tribunales judíos y paganos,
ante los cuales los discípulos tendrán que dar testimonio, denunciados a veces
por sus propios familiares; insinuando el evangelista, la dolorosa experiencia
del abandono de la fe, y proponiendo la huida como medio para escapar a tanta
tribulación.
En la sociedad en la que vivimos encontraremos personas que nos atacarán
por causa de Jesús, y esos ataques tendrán como finalidad que nos apartemos de
Dios y de la verdad, para que no seamos sal y luz en medio del ambiente que nos
corresponda cristianizar.
En un mundo cargado de malos ejemplos, donde el oportunismo y el
conformismo está a la orden del día, en nuestra condición de seguidores de
Jesús debemos dar ejemplo de amar la verdad, aunque esto acarree persecuciones.
Ese amor a la verdad llevará a mantener una conciencia clara, sin engaños,
sobre todo en una sociedad permisiva en la que tantas veces la mentira es la
manera habitual de comportarse.
Oración. Danos, Señor, la fortaleza necesaria para
que poder seguirte siempre a pesar de las mentiras, intrigas y trampas que nos
tiendan por ser fiel a tus enseñanzas. Amén.
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