La Fiesta Solemne del Santísimo Cuerpo y Sangre de Nuestro Señor Jesucristo (Corpus Christi)

Actualidad | Alcedo A. Ramírez

 

La Fiesta Solemne del Santísimo Cuerpo y Sangre de Nuestro Señor Jesucristo (Corpus Christi)

 

La Iglesia Católica celebra este jueves, segundo después de Pentecostés, la Solemnidad de Corpus Christi, la cual viene a ser una de las mayores celebraciones de la Iglesia Universal, como memorial de la Ultima Cena, en la que Cristo Jesús nos dejó el legado imperecedero de la Eucaristía, Sacramento de Fe. Esta tradición de la Iglesia, que nos viene desde mediados del Siglo XIII, sirve para tener bien presentes que, en la Santa Misa, el pan de la hostia y el vino de la vid se convierten en el Cuerpo y la Sangre del mismo Jesucristo, quien así permanece con nosotros hasta el final de los tiempos.

 

De esta manera, la Pascua de Resurrección se convierte en una prolongación infinita de ese gran Misterio que representa el corazón de la creencia cristiana, por el cual los cristianos estamos seguros del triunfo de Cristo Jesús sobre la muerte, su permanencia entre nosotros y que permite proclamar a todos los vientos que Jesucristo Está Vivo, por lo que actúa en la Historia de la Salvación de la Humanidad. Asimismo, nos podemos encontrar con Él, todos los días, en el Santo Tabernáculo y en la Sagrada Eucaristía.

 

Precisamente en este Año Jubilar de la Esperanza, los Cristianos Comprometidos con sus Comunidades tenemos la obligación de asistir y participar en todos los eventos, caminatas y procesiones que se lleven a cabo en todas las Diócesis y Parroquias de la República Dominicana, con el fin de establecer claramente que todos los dominicanos estamos celebrando un Día de Fiesta, libres de los horarios y trabajos regulares, porque SOMOS un PUEBLO CRISTIANO, que cree en Dios, por su Amor nos envió a su Hijo, como Mesías, Redentor y Salvador, para que con la ayuda del Espíritu Santo podamos hacer realidad la Esperanza de un Mejor País.

 

Jesucristo en la Eucaristía representa la solidez y verdad de Nuestra Esperanza, cuando recordamos las Palabras del Evangelio que dicen: El que coma de este pan vivirá para siempre. Con este aviso extraordinario de eternidad y permanencia en el tiempo, todos los dominicanos conscientes tenemos que volver a la realidad de nuestras propias raíces culturales cristianas, para seguir luchando y trabajando incansablemente por un mejor país, en el cual la alegría, la fraternidad el gozo, la justicia, la paz y la solidaridad sean las monedas sociales de curso, indicativas de una sociedad fuerte y segura.

 

Al escuchar las Palabras Bíblicas de que “Mi Sangre es Verdadera Bebida”, nos viene a la mente la Alegría de una Fiesta Eucarística, que celebramos cada vez que acudimos a la Santísima Misa y comulgamos, con lo que nos llenamos del Amor de Dios, que hace de Nuestra Fe Cristiana un Himno de Esperanza para todos aquellos que necesitamos las fuerzas necesarias para acometer los grandes compromisos, proyectos y trabajos que requieren la corrección y solución de los graves problemas que aquejan la Sociedad Dominicana, pero principalmente a los excluidos, desamparados y pobres.

 

Corpus Christi, Sacramento de Esperanza, que estamos celebrando este jueves, nos afirma en la Fe que todos tenemos como bautizados en el Espíritu Santo, para que el Amor a Dios y al Prójimo permita renovar cada día, y hasta el fin de los tiempos, el mandato cristiano de hacer a todo el mundo discípulos de Jesucristo, para que unidos todos podamos asegurar el establecimiento real del Reino de Dios aquí en la tierra.

 

Celebremos con entusiasmo esta gran Solemnidad del Cuerpo y la Sangre de Cristo, participando masivamente en los actos y actividades que se están programando en todo el País, como forma de reiterar nuestra Cultura y Sociedad Cristianas, pero también como recordatorio permanente de que queremos una mejor República Dominicana.