Familia | Sandy Yanilda Fermín
¡Cuido mi Espacio Familiar!
Cuidar mi espacio familiar va más allá de
buscar palabras apropiadas o temas interesantes en internet, consultar con un especialista, mirar
hacia el presente, no el pasado ni el futuro. Vivir a plenitud a tu familia: es
también reírse de sus chistes, celebrar sus ocurrencias y dejar las
restricciones del momento.
Cuidar mi espacio familiar, es dejar de
hacer lo que estoy haciendo en el momento presente y atender el espacio que uno
de tu familia quiere en ese preciso instante. A veces pensamos, “dedicaré más
espacio a mi familia”, cuando deberíamos utilizar un verbo en el presente: Cuido
día a día mi espacio familiar.
Desde tiempos remotos, es normal que las
familias busquen formas de estar juntos; por ejemplo, en las épocas
prehistóricas tenían que permanecer mucho tiempo en las cavernas y tenían
encuentros familiares al azar. Así nos lo relata el poeta latino Tito Lucrecia
Caro, cuando aclara en su obra De Natura Rerum (De la naturaleza de las cosas).
En el antiguo testamento en el libro del
Deuteronomio 6, 6-7 encontramos a Dios quien nos habla de cuidar el espacio
familiar:
“Y estas palabras que yo te mando hoy
estarán sobre tu corazón; y se las repetirás a tus hijos y les hablarás de
ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y cuando te acuestes y
cuando te levantes”.
En el nuevo testamento en el libro de los
Hechos 16, 31, ellos dijeron: “Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y
tu casa”. En este mes de la familia, esta cita es de reflexión para la Iglesia
dominicana.
Por tanto, es bueno preguntarnos: ¿Los
momentos que paso con mi familia son agradables para ellos? ¿Los escucho? ¿Me
divierto el verlos conversar?
¡Cada día que pasa es una Bendición de
Dios! ¡Hay que aprovecharlos!
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