Matrimonio | Noelito de León Mercedes, MSC
El paso del matrimonio de ser un orden social a un acuerdo
personal
En la estructura
familiar antigua estaba incluida toda la comunidad familiar: abuelos, padres,
hijos e hijas casados, el barrio, todos estos núcleos familiares forjaban una
estructura económica. Es decir, casarse era entrar en un orden social. No hay
que perder de vista que los cambios surgidos en nuestra civilización, dentro de
la historia de la humanidad, son las consecuencias que nos llevan a formular
que la vida conyugal, ha estado reducida a su forma propia y auténtica, la
experiencia de unión entre dos personas hoy en dÃa se caracteriza por ser un
acontecimiento personal.
A continuación,
presentaré algunos factores que han influido en el paso de ser un compromiso
social a ser una estructura personal de los cónyuges:
El trabajo:
El lugar de trabajo no
coincide con el lugar domiciliario, la sociedad actual se divide en un
determinado número de factores que enfrenta la familia. El trabajo
anteriormente era un factor de unión, ahora es más bien de separación, el padre
y la madre tienen que dirigirse a su lugar de trabajo y no pueden consagrarse a
la vida conyugal sino después de sus horas laborales.
La modernidad:
Al surgir las modificaciones
en las estructuras de la sociedad debido a la industrialización y la
urbanización, también el matrimonio, como orden social, ha tenido su cambio,
los que anteriormente era responsabilidad del conjunto de la sociedad familiar
ahora son asumidos por diferentes organizaciones modernas de la ciudad y de sus
sistemas económicos.
Los hijos:
Para el papa Francisco
el matrimonio es el santuario de la
vida, es el espacio donde la vida es generada, por tal razón constituye una
contradicción que se convierta en lugar donde la vida es negada y destrozada.
La mujer:
la mujer ha logrado
fomentar la reciprocidad de ayuda, la intimidad del dialogo. Estos también
forjaran a una legislación nueva sobre los derechos de la mujer y de los hijos.
Este nuevo estado de la pareja permite el desarrollo de la intersubjetividad
del matrimonio.
Partiendo de todas
estas modificaciones presentadas anteriormente, podemos decir que el ser mismo
del matrimonio se desarrolla mejor. Es para la vida conyugal una nueva ocasión
de interioridad. Si de innumerables familias, la mayor parte permanecen unidas
a pesar de la situación de debilidad de la sociedad, se puede marcar un avance
frente a la forma de ver el matrimonio en la antigüedad, es un paso de
esperanza para las nuevas estructuras familiares.
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