Mensaje del Celam a
los obispos de Cuba:
“Les animamos a continuar sosteniendo la esperanza”
CELAM, propuestas para superar crisis cubana
La
Conferencia Episcopal Latinoamericana (CELAM), a través de su presidente Mons.
Miguel Cabrejos y de su secretario general Mons. Jorge Lozano, se han unido al
llamado de la Iglesia cubana por respuesta a los reclamos del pueblo. Los prelados
han dicho que la respuesta no sea el inmovilismo, ni dar largas para la
continuación de los problemas sin soluciones viables que provoquen posiciones
de dureza que sean de mal para todos.
"Recordamos
al Papa Francisco quien nos ha pedido que a través del diálogo se puedan
resolver todos los problemas por los que atraviesa el pueblo cubano y por los
cuales piden a gritos ser escuchados", dicen.
"Pedimos al
gobierno buscar caminos para el diálogo pues sabemos que con violencia o
acciones agresivas hacia el pueblo no podemos avanzar hacia la fraternidad,
justicia y paz. Le invitamos a seguir manteniendo la esperanza del pueblo y fortalecerles
por el bien de toso. Oramos y les encomendamos muy especialmente a la Virgen de
la Caridad, Madre del pueblo cubano su intercesión."
"Ante las
protestas surgidas el pasado 11 de julio por todo el país, vemos con interés y
respeto profundo el clamor de la gente, como personas que vivimos desde la fe
en la vida consagrada recibimos y reconocemos en sus reclamos la voz de Dios,
voz de quienes salieron en protesta, gente común pero descontenta que expresa
su sentir."
En vista de
ello proponemos cinco puntos a nuestro ver indispensables para la superación de
la crisis y entre todos construir la fraternidad:
1- Recordemos y
defendamos que es un derecho legítimo y universal de cualquier
ciudadano manifestar sus reclamos de manera ordenada y pacífica en el
espacio público que no es monopolio y privilegio de ningún grupo ideológico
determinado.
2- Es necesaria
la pronta liberación de todos los que han sido apresados injustamente por
el solo hecho de ejercer el derecho a manifestarse, a expresar sus reclamos.
3- Reclamamos el
derecho a la información y comunicación que ha sido violado al extremo
cortando la conexión de la telefonía móvil y bloqueando las redes sociales.
Esto aumenta la incertidumbre y el desconcierto en una población que ya se
siente agobiada por situaciones económicas, sanitarias y sociales críticas.
4- Todos debemos
evitar caer en la trampa de la violencia como modo de imponer la propia
verdad. Nos preocupa que por falta de capacidad de diálogo y de escucha se
ataque, repudie, persiga y condene desde el gobierno a los que piensan
diversamente y lo expresan en público.
5- Es importante escucharnos entre todos para poner remedio a las causas que originaron estas manifestaciones. Solo yendo a la raíz de los problemas podremos remediarlos verdaderamente.
Fuente: Religión Digital.
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